En este caso, me voy a limitar prácticamente a citar un pequeño texto, porque creo que es tan brillante que poco se puede añadir. Con tanto alarmismo en lo que a internet se refiere, y con tantos políticos e instituciones de diversos tipos tratando de meter sus grasientas manos en algo tan complejo como es internet, sin tener la más mínima idea en muchas ocasiones de lo que están hablando, es conveniente compartir este texto, ya que su sencillez para explicar este medio lo hace comprensible incluso a aquel que no esté familiarizado con el mismo.
Pero Internet es como una gran ciudad y, como todas las ciudades, tiene bibliotecas monumentales, y teatros, y museos, y un montón de sitios en los que encontrar información. Tienes infraestructuras fantásticas, y museos especializados, no solo generales. Pero hay también suburbios, y barrios de prostitutas, y sitios realmente sórdidos en los que no querrías ver a tus hijos paseando solos.
Y piensas, “¿pero cómo voy a saber en esta ciudad qué tiendas venden cosas buenas y cuáles malas? ¿Cómo saber qué calles son seguras y cuáles no lo son? Pues el caso es que te enteras. Y lo último que necesitas son unas autoridades hipertrofiadas, un montón de documentos de identidad o unos guardaespaldas acompañándote por toda la ciudad porque no puedes confiar en ti mismo o en tus hijos para ello.
La gente tiene que entender que Internet es una ciudad nueva, una ciudad virtual, y que por supuesto, habrá partes de esa ciudad que no les gusten. Pero no te vas a cargar Londres porque tenga un barrio de prostitutas…
Así lo expone Stephen Fry en una entrevista para la BBC.
Vía | Alt1040