Tantos meses hablando de cambio y al final va a resultar que Obama tampoco es tan diferente a los demás políticos norteamericanos. Al menos eso es lo que podemos pensar una vez conozcamos ciertas ideas y afirmaciones del candidato demócrata. Si es que al final va a ser verdad eso de que todos los políticos son iguales.
Obama no es el «negrito bueno» que nos pinta la prensa yanki. Es sólo otro candidato demócrata más, el «Bill Clinton negro» No hay mucha diferencia entre él y Hillary Clinton (ambos no tenían plan de retirada para los tropas en Irak durante su pre – campaña). Entonces ¿dónde está la esperanza de cambio y progreso? El votante norteamericano está entre la espada y la pared. Deberá elegir entre el sucesor de Bush: un sujeto que echaba napalm sobre Indochina (Mc Cain fue piloto de bombardero durante la guerra de Vietnam) y un tipo que está a favor de la pena de muerte, y de evitar que Irán continúe con su programa nuclear civil «a cualquier precio». Y ese precio sería sin duda la tercera guerra mundial. ¡Cuando no, USA!
Es cierto eso que dices, es triste pero por lo que voy viendo cierto.