Yo me quedo con los buenos momentos, me quedo con las risas, con el gesto amable, con la ilusión del recién llegado y la sabiduría del viejo conocido. Yo me quedo con el recuerdo de quien ya no puede estar con nosotros, haciendo que viva en mi recuerdo por siempre, es así como algunos amigos perviven en mis recuerdos, cuando los hecho de menos tan sólo tengo que acordarme de ellos, y ahí están, dándome consejo, diciéndome que sonría al mundo, indicándome el sendero, moviendo mis labios cuando me quedo sin palabras y secando mis lágrimas cuando éstas brotan de mis ojos. Por todos aquellos que nos dejan sin poder siquiera despedirnos, quisiera agradecerles haberme permitido captar algo de su esencia, haber sido partícipe de unos instantes de su vida, haber intercambiado palabras y sonrisas… Doy gracias por alegrar mis recuerdos, por sonreírme en la memoria, y por seguir conmigo de por vida, aún no estando de cuerpo presentes, si está su viva imagen en mi pensamiento, mis compañeros de viaje.

Siempre me acordaré de ustedes, de Maiquel, de David, de mi abuelo… Desgraciadamente la lista crece…

¡Hasta siempre Annika Skoeries, gracias por traer una sonrisa a nuestra clase, no te olvidaremos!

P.D. Quizá no entiendan ese post, pero realmente no es para ustedes, es para mí, es una forma adicional de mantener vivo el recuerdo, es una forma de tener un lugar al que acudir para recordar. Me niego a que ciertas personas sean olvidadas, porque cada uno es importante, y es importante que sea recordado por quienes pudieron conocerle, más o menos, eso realmente no importa, lo que importa es recordar.

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