Siempre que uno o más países deciden entrar en guerra, los que sufren las consecuencias son las personas que poco o nada tienen que ver con todo el enfrentamiento. Lo que está aconteciendo en el Líbano y en Gaza, los ataques, bajo mi punto de vista, desproporcionados de Israel, es simplemente un triste ejemplo más.
Por lo que se ve, los militares israelís están empleando armamento químico y otro tipo de instrumentos de matanza prohibidos por la ONU en ataques contra zonas habitadas. Esto es lo que me duele realmente, la gente que pierde piernas y brazos, que sufre quemaduras y todo tipo de lesiones gravísimas, o incluso pagan con la muerte estos innecesarios enfrentamientos son pobres personas que tan sólo quieren vivir como todos nosotros.
Espero que se ponga fin lo antes posible a esta guerra. No más muertos por la estupidez de los políticos y sus ansias de amargarnos la vida a los que sufrimos sus decisiones nefastas. Pero temo que esto no va a ser así.